Una importante representación de investigadores, agricultores y productores del sector del olivar se han dado cita en el inicio de las Jornadas Técnicas inauguradas en el día de hoy.

El primer módulo de las Jornadas Técnicas de la Feria del Olivo de Montoro ha contado con una numerosa participación de asistentes en cada una de las ponencias que se han ido desarrollando durante toda la mañana y parte de la tarde de hoy. La presidenta del Consorcio Feria del Olivo y AEMO, Ana María Romero, ha sido la encargada de la apertura del acto señalando que «tenemos que seguir trabajando por el pequeño y mediano agricultor que son los responsables de mantener vivos los municipios que nos han permitido que en Andalucía, a pesar de comenzar a tener despoblación, no ha sido un factor tan señalado como en el caso de otras regiones de España». Además, ha agradecido a los participantes y expertos su asistencia animando a mirar por la rentabilidad, «luchemos para que se sigan aportando recursos por medio de la Unión Europea, pero que no recorten de la PAC». Por último, ha concluido «nosotros también como agricultores, envasadores, y almazaras tenemos que hacer nuestra tarea: conseguir el mejor precio y, evidentemente, elaborarlo al mejor coste, con lo cual espero que estas jornadas sirvan de aprendizaje y llevemos un buen mensaje, nuevas iniciativas e inquietudes con respecto a este sector».

Seguidamente, Luis Rallo Romero, catedrático de Producción Vegetal del Departamento de Agronomía de la Universidad de Córdoba y ganador del XIV Premio Andalucía de Investigación Plácido Fernández Viagas por su actividad investigadora y docente sobre el olivar ha ejercido de moderador cediéndole la palabra a José María Penco, Director Técnico de AEMO.

La ponencia Penco ha versado sobre “Los costes de cultivo en Sistemas Tradicionales vs Alta Densidad”, centrándose sobre la rentabilidad del cultivo del olivo: «se ha mostrado un estudio que realizamos desde AEMO en el año 2015 sobre el coste de producción de un kilo de aceite oliva por kilo de aceituna. Diferenciamos el olivar español en cinco tipos de olivares: olivar intensivo, olivar superintensivo, olivar tradicional mecanizable, olivar tradicional no mecanizable y olivar en riego y en secano y posteriormente, determinar cuánto vale producir un kilo de aceite. ¿Qué conclusión sacamos? Obtenemos que es necesario que el aceite tenga un precio digno para que los ingresos puedan ser superiores a los costes, ya que, en los últimos años, el precio del aceite en España es bajo, con lo cual cuesta más producir que los ingresos que se generan» ha aclarado el Director de AEMO.

Seguidamente, Javier Hidalgo (IFAPA) ha expuesto sobre la “Gestión óptima de recursos hídricos en olivar”, donde ha dado las cifras generales de superficie de riego de olivar, que supone un 36% de la superficie total de Andalucía. También ha hecho un recorrido desde los inicios de riego en los años 90, ya que hasta entonces no había prácticamente superficie de olivar regado. «A raíz de una sequía se empezó a regar y comenzaron a surgir comunidades de regantes. Entre los años 90 y principios del 2000, se crearon un total de seis infraestructuras con riego localizado. Hay que añadir que las concesiones de riego son escasas, no cubren las necesidades de cultivo. Desde sus inicios, 750 m3, 1000 m3 y 1500 m3 se cubrían por hectárea». Hidalgo ha hablado sobre cómo se calculan las necesidades del olivo en función del marco de plantación, densidad, desarrollo de los árboles y del año en función de la pluviometría, donde actualmente puede llegar a situarse en cifras entre 3000 m3 y 5000 m3. «Nadie cuenta con esas cantidades, son riegos deficitarios. Nosotros (IFAPA) y el CSIF hemos desarrollado una metodología de cálculo de riego y diferentes ensayos de riego, tanto para variedades de almazara como de mesa».

Por su parte, Raúl de la Rosa (IFAPA) ha dedicado su presentación “Nuevas variedades para alta densidad”, una exposición adaptada al olivar en seto. El olivar en seto es un nuevo tipo de olivar donde la densidad de cultivo es mucho más alta que la de otras variedades actuales que se cultivan en Andalucía, como picual hojiblanca. «Hay poca variedad adaptada a este sistema, como son arbequina y arbosana. En el IFAPA tenemos un programa de obtención de nuevas variedades, con lo que estamos intentando obtener nuevas variedades que se adapten bien» ha añadido De la Rosa. La ponencia ha sido orientada hacia los avances que están teniendo con el programa y el comportamiento de las variedades, ya que, «debido a factores como las distintas condiciones ambientales, no es lo mismo cultivar en Jaén, en Córdoba o en Huelva, las condiciones son distintas y el comportamiento de las variedades que hemos visto varía sustancialmente» ha concluido.  

Acto seguido, la ponencia “El olivar intensivo: manejo y producciones” a cargo de Victorino Vega (IFAPA) se ha basado en el diseño de plantaciones basadas en lo que hoy conocemos como la nueva olivicultura intensiva. Es decir, olivar intensivo. «Es un diseño de plantación basado en una arquitectura de olivar muy concreta, que son árboles a un pie formados en vaso libre aptos para la recolección mecanizada y de alta producción. Desarrollando todo este tema en el potencial productivo que tienen, resultados experimentales y distintas vías para mejorar la producción» ha señalado Vega.

Por último, Concepción Muñoz (Universidad de Córdoba) ha intervenido con su presentación “El olivar en seto: manejo y producciones”, abordando del cultivo en seto al cultivo del olivar superintensivo y explicando los resultados que se han obtenido en el ensayo realizado en la Universidad de Córdoba. Vega ha explicado que «el punto más importante de estos ensayos -ha destacado Muñoz-, es que presentan datos de 14 años de cosecha, con lo cual, estos resultados dan ideas de la longevidad de las plantaciones, que era una duda muy importante que surgía cuándo empezaron en los años 90. Catorce años después de la plantación seguimos teniendo producciones constantes sin que no hayan decaído». Concepción Muñoz también ha mencionado otras iniciativas importantes a destacar en su exposición como la experimentación en olivar superintensivo en el efecto de la orientación de la fila o la posibilidad de cultivar la aceituna de mesa en olivar en olivar en seto.

Durante la tarde, el proyecto Innolivar ha tomado el relevo. Esta iniciativa respaldada por la Administración, Universidad de Córdoba y la Interprofesional del Aceite de Oliva, cuyos cimientos se basan en el estudio, análisis y desarrollo de estrategias de I+D, adaptadas a la demanda del sector empresarial y centrándose en el avance de prototipos que mejoren la tecnificación y rentabilidad económica del olivar.

Esta iniciativa surgió a partir del grupo de investigación de Mecanización y Tecnología Rural de la Universidad de Córdoba dirigido por Jesús Gil Ribes, Catedrático de Ingeniería Rural de la misma universidad. Equipos que tratan de ofrecer nuevas soluciones técnicas a la recolección, la aplicación de fitosanitarios y al manejo de suelos en el olivar español. Entre las máquinas desarrolladas hay soluciones tecnológicas para el olivar intensivo -los mayores avances se han logrado en aquellos destinados al olivar tradicional-, modalidad que impera en España.

Entre las creaciones impulsadas por Innolivar, destacan el desarrollo de cosechadoras integrales para la recolección, una novedad absoluta ya que hasta la fecha existían sistemas compuestos, un sistema lento y caro. En este proyecto de investigación, está el trabajo de personas que trabajan y estudian abaratar los costes de producción que suponen a veces, la mitad de los importes destinados al cultivo. Una maquinaria eficiente que alarga la vida de todo el olivar siendo capaz de tirar el fruto, hacer una prelimpieza y almacenarlo de forma autónoma, es garantía de futuro asegurado.